Eso que a simple vista puede parecer una frase hecha, el pasado 5 de junio se convirtió en una realidad para muchos.

Por la mañana asistimos a la habitual exhibición de aviones históricos de la FIO el primer domingo de cada mes en el aeródromo de Cuatro Vientos. Tan habitual como el apoyo, cariño y profesionalidad se palpa siempre que colaboran con nosotros. 
En esta ocasión, esa gran familia que es la Fundación Infante de Orleans, no solo nos facilitó el acceso a la exhibición aérea sino que nos cedió un espacio para poner nuestro modesto “stand” y darnos a conocer y puso su taller infantil y su visita guiada a disposición de ASF y de las 35 personas del Hospital Fundación Instituto SanJosé  que nos acompañaban ese día. Un placer que todos, asistentes y voluntarios de ASF, saboreamos a placer.

Por la tarde disfrutamos de un Alas de la Sonrisa muy especial, con más de 90 refugiados ucranianos 🇺🇦 en el Aeródromo de Casarrubios.

Nuestro embajador, Juan Velarde, y sus amigos Castor Fantoba y la asociación Jacob 52, nos abrieron las puertas de su hangar. Transcurridos más de tres meses desde el inicio del conflicto en Ucrania, por fin pudimos poner nuestro granito de arena aportando algo de alivio y distracción a las familias que nos visitaron y compartir con ellos un poco nuestro amor por la aviación gracias a la colaboración de CEAR y la Fundación Jaime Garralda Horizontes Abiertos.

Queremos agradecer desde aquí a todas las personas y empresas que colaboran con Aviación Sin Fronteras, nos ayudan a tocar el cielo en cada actividad y logran que cada Alas de la Sonrisa sea único y especial. Nos sentimos muy afortunados por poder ayudar a infundir ilusión y esperanza en el mundo y nos encanta que medios como RTVE, Telemadrid y CLM Castilla La Mancha difundan nuestros proyectos y actividades.