Nuestra compañera Elena Madueño, coordinadora del proyecto de escolarización en Burkina Faso, nos relata la situación actual respecto al proyecto de alfabetización en este estado de África occidental.
“Se han distribuido a fecha de 30 de enero de 2020, 1631 kits (compuestos por camisetas y mochilas) y se han pagado las cotizaciones correspondientes, salvo en las escuelas donde AETM (asociación francesa) paga la cotización de sus beneficiarios, un total de 137.
Por ello, la misión se cierra con un gasto de 5.742 euros, más las becas de los beneficiarios del Liceo, que alcanzan los 700 euros. Todo esto hace suma una inversión total de 6.442 euros en esta maravillosa misión 2019-2020.
En cuanto a las becas en este mes, Bolly Soumaila, (la persona de enlace de ASF) entregó a cada familia de los beneficiarios de becas un total de 100 euros. El gasto de cada beneficiario varía en función del curso que realizan, el material necesario, el uniforme, el comedor y el centro donde cursan estudios. Esta cantidad supone una ayuda importante para que las familias continúen apoyando a sus hijos a ir a la escuela y los animen a seguir estudiando ya que la ayuda es para los beneficiarios sobretodo y para las familias en segundo lugar. Es muy importante contar con el apoyo familiar para que no abandonen los estudios.
El compromiso adquirido es que a final de año (junio/julio) se les enviará un informe a los padrinos sobre los resultados escolares de su beneficiario.
A continuación, vemos imágenes de cómo se desarrolla la preparación del material escolar antes de llevarlas a las inspecciones para que finalmente puedan ser distribuidas junto a las cotizaciones:
Hace más de 13 años pusimos los pies por vez primera en Burkina Faso, “la tierra de hombres íntegros”, para ayudar a un grupo de 30 niños en situación desfavorecida a seguir en la escuela con la entrega de material escolar y el pago de las tasas de escolarización (unos 3 euro por niño/año).
Durante años, el grupo de voluntarios que se desplazaba al país cada noviembre durante 10 días disfrutaba de la libertad de moverse de forma segura por el país y dentro de sus ciudades, ya que, Burkina Faso, era considerado uno de los países que mejor acogía a la cooperación ya que, aun siendo el sexto país más pobre del planeta, nos sentíamos seguros rodeado de sus gentes. Desde hace dos años, los voluntarios de ASF no han podido regresar al país debido a la situación de inseguridad en la que viven sus habitantes y todo extranjero que viaje por el país. La amenaza constante del terrorismo islámico, el vacío de poder y la entrada de armas que se produjo tras el golpe de Estado, sumado a un conflicto étnico incipiente sumen a este, nuestro adorado Burkina, en una situación ya de por sí difícil.
Sin embargo, todo ello no nos ha impedido seguir con nuestro Proyecto de Alfabetización y ayuda a la escolarización de nuestros beneficiarios, con los que tenemos un compromiso adquirido que no queremos romper. ASF cree que es importante no abandonar a nuestros beneficiarios ahora que es tan necesario.
Bolly, nuestro colaborador local y amigo desde que empezamos con el proyecto en Bilbalogo, hace posible desde hace dos años que nuestro más de 1600 beneficiarios reciban cada uno su mochila y su camiseta, además del pago a la escuela que alivia a sus familias de este coste y les anima a seguir asistiendo a la escuela.
Además, para ayudar a algunos de nuestros beneficiarios que pasaban a la escuela secundaria, hace tres años, pusimos en marcha nuestro sistema de Becas de Liceo, para seguir apoyándoles a través de un nuevo sistema de apadrinamiento. Los siete padrinos, socios/voluntarios de ASF, han permitido pagar sus uniformes, material escolar, el comedor durante todo el año y las tasas del instituto para este 2019-2020.
ASF sigue presente en Burkina gracias a la colaboración de donantes, de nuestros siete padrinos, de toda la gente de ASF que trabaja desde España y a Bolly Soumaila que hacen este proyecto posible. La educación es el futuro de un país.
Respecto a los comedores, cabe añadir que durante los próximos meses de abril y mayo, ASF comprará localmente arroz y aceite para ser distribuido entre las cantinas de los colegios a los que van nuestros beneficiarios”
Muchas gracias a todos, con cariño, Elena.